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ELEONOR PARKER (Estrella de la M. G. M.)
Una belleza que impone respeto EL triunfo
cinematográfico de Eleonor Parker no se debe a
ninguna circunstancia fortuita, sino que es el
fruto de su firme convicción. Ella supo lo que
deseaba desde que asistía a la escuela primaria.
Cierto día anunció a su padre que proyectaba
convertirse en actriz y que había entrado a
formar parte del club dramático escolar. El
autor de sus días, un adusto profesor de
matemáticas —a quien le apasionaban los números
pero no precisamente los artísticos —. Se inmutó
un tanto, pero por fin accedió a ir a verla
actuar en la obra que representaba. Tuvo que
admitir, entonces, que su hija, además de
resolución, tenía talento natural. Años
después, Eleonor Parker volvió a recurrir al
asentimiento paterno para pasar sus vacaciones
veraniegas con una compañía de repertorio. Lo
obtuvo, y desde entonces todos sus esfuerzos y
aspiraciones se han concentrado en el teatro y
en el cine. A continuación de trabajar con
ese grupo se dirigió a Pasadena (California) y
se unió al Teatro de Aficionados, con el que
actuó en una extensa y exitosa temporada. No
obstante, su descubrimiento no ocurrió en un
escenario, sino que fué vista por un
"buscatalentos" de Hollywood, cuando se hallaba
convertida en una simple espectadora, siendo
contratada inmediatamente. Pasó dos años en
el estudio tomando lecciones con un profesor de
declamación y aprendiendo todo lo que pudo sobre
el arte de la actuación cinematográfica. En el
ínterin interpretó papeles insignificantes, pero
nunca desmayó ante esa larga espera en procura
de una mejor oportunidad. "Nunca esperé
alcanzar un éxito meteórico —dice la bella
actriz de insinuantes ojos grises—, y me siento
agradecida de haber podido prepararme tan a
fondo antes de actuar en un papel de
importancia." Tuvo esta oportunidad en
el
film "Misión en Moscú" y luego en su primer
papel estelar en "Con sólo pensar en ti".
Recibió grandes elogios por sus lucidas
actuaciones en éstas y otras películas,
incluyendo "Esclavos de su pasión" y "Rodolfo
Valentino". Su perseverancia y arduo trabajo
dieron sus frutos cuando recibió una mención de
la Academia por su magnífica labor en "Amarga
condena". Recientemente, cuando George Sidnel y
Carey Wilson se hallaban buscando una actriz
para el papel femenino principal de
"Scaramouche", sometieron a Eleonor a una
prueba, de la que salió triunfante. Al
estrenarse la versión de la obra de Sabattini.
el crítico de "The Daily Compass" expresó:
"Eleonor Parker es positivamente hermosa y
fascinadora como la fogosa Leonore" Y más
categórico aun fué el juicio de "The New Times",
al decir: "Es realmente Eleonor Parker quien se
lleva los lauros femeninos como la pelirroja y
fogosa artista que no da tregua al héroe." Ante
este éxito, la MGM le asignó en seguida el papel
central de "El honor de su nombre", en la que
encarna a la esposa de Robert Taylor. Eleonor
Parker es muy firme en sus gustos, así como en
sus opiniones e ideas. Cuando se halla en el
escenario, generalmente la llaman por su
apellido —"la Parker"—, debido a su innata
dignidad que emana respeto. Es rubia, mide 1
metro 68 centímetros de estatura y pesa 55
kilos. Siendo, como es, una muchacha seria
logró, mediante estudiados planes y arduo
trabajo, convertir sus sueños en realidad, así
como combinar su carrera y su hogar. Está casada
y tiene dos hijas, Susan, que nació en 1948, y
Sharon, en 1p50. Ambas, juntamente con su esposo
y su trabajo, constituyen las grandes pasiones
de su vida. Revista PBT 13.03.1953
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