Sancor
LAS VENTAJAS DEL COOPERATIVISMO
Volver al índice
del sitio
La promulgación de la Ley sobre cooperativas en 1926, le permitió a 16 tamberos de Córdoba y Santa Fe colocar la piedra fundamental de Sancor, una empresa que finalmente logró ubicarse al tope de la industria láctea nacional, con un procesamiento récord —en 1974— de 4 millones de litros de leche diaria.

LOS primeros meses del año significaron para Sancor Cooperativas Unidas Limitada un récord sin precedentes en sus 33 años de vida: la industrialización de 4 millones de leche diarios. Una cifra altamente positiva si se tiene en cuenta que representa una cuarta parte de la producción nacional de ese producto.
Abastecida por 18.000 tambos, agrupados en 415 cooperativas asociadas, ocupa desde hace varios años un holgado liderazgo dentro del mercado local, robustecido por una importante participación en las exportaciones tradicionales del país.
Iniciada con la producción de manteca, una sólida evolución los llevó a elaborar la casi totalidad de los productos lácteos posibles: manteca, queso, caseína, leche en polvo y pasteurizada, dulce de leche, cremas heladas, yoghurt, crema pasteurizada, mayonesa y leche descremada.

La unión de los tamberos
A principios de siglo, la perspectiva de un futuro incierto para la agricultura, generó una transformación hacia las explotaciones ganadero-tamberas que ofrecía una mayor estabilidad económica al sector. No obstante el cambio, los primeros: pasos en materia de producción de leche se mantenían dentro de un régimen sumamente elemental con un abastecimiento de tipo localista.
La evolución del consumo y las mayores exigencias de la población en materia de productos lácteos, organizó las primeras explotaciones industriales privadas, denominadas queserías y cremerías. Consecuentemente, el tambero comenzó a depender en forma exclusiva del industrial que compraba su producción.
La sanción de la Ley 11.388 en 1926, sobre el régimen legal de las sociedades cooperativas, abrió una posibilidad de organización para el sector generador de la materia prima. Es así como en 1930, en la colonia de Sunchales, Santa Fe, se cristalizan los primeros intentos para constituir una cooperativa de tamberos de primer grado.
"Encabezados por Juan V. B. Mitri, un grupo de tamberos de Sunchales y zonas vecinas, decide a fines del 37 organizar una cooperativa de segundo grado, que agrupara a las de primer grado, y que les permitiera montar una fábrica de manteca propio, teniendo así el control de la comercialización del producto terminado", relató a Redacción el presidente de Sancor, Aldo H. Cantón.
La idea recién se concretó un año más tarde con el aporte de 16 cooperativas tamberas de Santa Fe, Córdoba, Buenos Aires y Santiago del Estero. Nace así Cooperativas Unidas Limitada Fábrica de Manteca de Sunchales. Dos años después y bajo la presidencia de Mitri, se inaugura la primera planta en esa colonia.
Bastó con la puesta en marcha para que paulatinamente otras cooperativas, remisas en los momentos iniciales, decidieran su incorporación, acrecentando rápidamente la infraestructura de abastecimiento de la flamante empresa; que en 1943 cambia su primitiva razón social por la de Sancor, inspirada en la fusión de la primera sílaba de Santa Fe y Córdoba.
El desarrollo inmediato de Sancor, adquiere un progresivo aceleramiento, para contar en la actualidad con cinco unidades productoras en Santa Fe (Sunchales. Gálvez, San Justo, Devoto y Santa Fe) y dos en Córdoba (Brinkmann y Córdoba). Claro que el procese no estuvo libre de escollos. El rápido crecimiento del mercado provocó el nacimiento de distintas empresas competidoras, algunas de gran significación como Dayrico, perteneciente al grupo internacional Lever, que compraba la manteca a Sancor, quedando en sus manos el fraccionamiento y la comercialización final. "Con el tiempo —recuerda Cantón—, Dayrico fue corrida del país por los tamberos argentinos, haciéndose cargo Sancor de la venta íntegra de todos sus productos"

Situación actual
De acuerdo con los datos estadísticos suministrados por la empresa. durante el último ejercicio (junio del 72 a junio del 73), la producción de manteca fue de 24.600 toneladas, lo que significó un incremento con respecto al período anterior de 12,33 por ciento. Por su parte, las exportaciones sumaron 8.600 toneladas, contra 1.900 del ejercicio 71-72. No obstante lo positivo del resultado, ciertas dificultades en las colocaciones externas, a raíz de una oferta internacional fuertemente subsidiada, obligaría a limitar los volúmenes de producción, exclusivamente a la evolución prevista del consumo interno.
La caseína, un producto que hasta no hace mucho ocupaba uno de los puestos principales en las listas de exportaciones tradicionales argentinas, fue sufriendo progresivamente una reducción en rus envíos por ser un subproducto de la manteca y por la permanente inestabilidad de los precios internacionales.
A pesar de ello, logró incrementar sus exportaciones en un 12,9 por ciento, en tanto que la producción total estuvo en las 9.600 toneladas (más 14,8 por ciento) y el consumo local en 2.800 (más 81 por ciento).
Por su parte, la elaboración de quesos ascendió en un 24.18 por ciento (33.400 toneladas) y las ventas locales un 27,9 (31.800), mientras que las exportaciones lo hicieron en un 11,22 por ciento (1.052 toneladas).
La producción de leche en polvo sobrepasó las 11.000 toneladas, las ventas internas rondaron las 7.100 y las externas las 14.100 toneladas. Cifra esta última que representa un halagüeño incremento del 153.9 por ciento. Mientras tanto, la leche pasteurizada contó con un producido de casi 57 millones de litros, vendiéndose prácticamente todo en el mercado local, lo que equivale, según datos oficiales-, a un magro aumento del 3 por ciento, debido a las distintas alternativas que sufrieron a lo largo del 73 los factores precios, costos e inflación.
El dulce de leche también alcanzó en el último ejercicio récords en materia de volúmenes colocados y tasa de crecimiento anual. Las ventas totales llegaron a sobrepasar las 8.100 toneladas (46,26 por ciento). previéndose alcanzar este año las 9.000 toneladas.
Por último, las ventas de cremas heladas superaron los 3 millones de litros y los considerados rubros menores (yoghurt, crema pasteurizada. mayonesa y leche descremada) se aproximaron en su totalidad, a los 10 millones de litros.
Revista Redacción
marzo de 1974

Ir Arriba

 


Sancor

Sancor