Siete Días Ilustrados
23.04.1973
Tapa: Maruja Robin
MEMORANDUMS De cómo rendir justicia a los grandes ignorados del
periodismo escrito
"¿Cuál foto es la que vamos a dar grande?". Esta pregunta se
repite no menos de diez veces por día frente a la mesa de trabajo
de Oscar Correa (foto), jefe de diagramación de la revista. Casi
siempre, equivale a la apertura de un debate que envuelve a
redactores y fotógrafos, dispuestos a hacer valer sus propios
criterios, a menudo divergentes. Ocurre que, si bien unos y otros
pugnan por ofrecer lo mejor de sí en beneficio del lector, no
siempre la foto preferida es la que responde más acabadamente al
espíritu de una determinada nota, y no siempre tal enfoque
redaccional constituye el mejor apoyo para un reportaje gráfico.
Es frecuente que Siete Días destaque fotos técnicamente
imperfectas (en perjuicio de otras, irreprochables) por la
sencilla razón de que, documentalmente, son más importantes, y
también que un redactor deba reelaborar y resumir su informe para
poder brindar una mayor amplitud de ilustración. Si bien la
evaluación de conceptos y la decisión final en materia estética
constituyen parte de la tarea del director (responsable de
extender o reducir los espacios prioritariamente asignados a cada
tema), en la práctica ningún veredicto se sustancia sin tomar la
opinión de Correa: vértice obligado de tanto amable planteo,
Correa es un profesional indisolublemente ligado a la personalidad
estética de la revista (a la que contribuyó a forjar) y por lo
tanto un idóneo componedor de criterios. Vale la pena
puntualizarlo, entre otras cosas porque la sección Diagramación
es, en cualquier medio de prensa escrita, la más alejada de la
notoriedad: generalmente se justiprecia la solvencia de un
redactor o un cronista gráfico, pero nunca la de quien ha
concebido la presentación de esos materiales para dotarlos de la
mayor posibilidad de lucimiento. Un olvido que roza la desidia, y
que estas líneas pretenden restañar.
Oscar Correa